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Poesía Crítica |
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Apartheid sueco
(1) ¿trabajo al de tercer mundo?
Me entrenaron al compás del mercado de trabajo me habían puesto en una rueda de ratas que siempre supo girar sin nunca llegar a un punto esperado.
Me sentaron diariamente, bajo la hosca administradora del mercado de seres humanos, con voz de sargento y amenazas, de represión económica.
Disciplinados ellos en el observar con disimulo, miraban siempre mi cabeza negra: ¿Me veían ellos, acaso, como un obscuro designio venido desde su infierno?
Supieron preguntarme una y mil veces en el ritmo de términos concatenados: Profesión, Especialidad, Experiencia, Nacionalidad; Y con el deseo de un compromiso total, Supe siempre afirmar, en mi inocencia, los elementos exquisitos en las preferencias de aquel mundo de burócratas racistas: Ingeniero, tecnología de la información, muchos años, sueco; y aunque la última palabra siempre se me atragantaba en una especie de total y final vergüenza para conseguir trabajo, sabia ya por anticipado, que no era la nacionalidad, era el color de mi piel, mi pelo y mi aspecto proveniente del Sur el que había sellado mi destino en este obscuro reino de Suecia. Actualizado agosto 2006. ------------------------------------- |