Las GUERRAS de Occidente 

(Nueva teoría del conflicto humano)

 
En PDF:
 
  • ¿Es social o genético el problema? 
  • El proceso económico histórico.
  • La traumática geopolítica occidental
  • Los hechos  mas que las palabras.
  • Consecuencias actuales y futuras.

- ¿Es social o genético el problema?

Los teoricos o especialistas opinan que el fenómeno conflicto y guerra, es atribuido al comportamiento humano inherente. Se plantea que el comportamiento humano destructivo es inevitable, en circunstancias y condiciones específicas para toda la especie humana: En realidad estos expertos generalizan.

Esta generalización se divide en tres corrientes de estudio;

  • La una, pretende explicar nuestra conducta destructiva como algo instintivo y definido por los  genes de nuestra estructura biológica individual.
  • La otra se refiere a la conducta social y el inevitable grado de egoísmo individual que motiva a todos en la competencia constante por adquirir los "bienes materiales" y lograr un posible nivel de poder en la estructura de la sociedad natural o contractualmente conformada.
  • Ambos aspectos suelen estar combinados, de acuerdo a las conveniencias de ciertas teorías políticas, los estudios a realizar y los intereses que pueden motivar dichos estudios y en especial sus aplicaciones.

Evidentemente, estos planteamientos son temas de interés académico y tienen gran influencia en las ideas de los sistemas sociales imperantes, tanto en su educación masiva como en la ideología que se impone desde y a partir del primer mundo.

Debemos afirmar que cuanto mas efectivamente cerrado, en su mundo conceptual es un sistema social, como "sistema funcional", tal sistema puede entrenar a sus ciudadanos en el desarrollo del egoísmo instrumentado y estructural y con ello, su etnocentrismo, su elitismo y su agresividad puede llegar a ser ilimitada y crónica;  y por ello se puede finalmente afirmar:

  • Las sociedades que tienen el egoísmo y la agresividad como algo inherente (construido) a sus existencias e imprimen esas características sobre sus ciudadanos como algo común, inevitable y generalizado, tendrán el conflicto y las guerras como herramienta necesaria.

Esto se puede confirmar, respecto al entrenamiento constante y efectivo de los "soldados de elite" en un ejercito en su capacidad de matar sin parpadear. Esa actitud, se convierte en un modo de vida y por ello, en esos altos grados de acción instintiva destructiva y condicionamiento permanente, se tiene también las consecuencias de un alto nivel individual de destructividad inherente a todo el grupo que pasa a conformar ese vector de fuerza para esas sociedades, ya como sociedades educadas y constructoras de agresividad.

En principio, podemos afirmar que la capacidad humana al aprendizaje es enorme; el ser humano puede ser entrenado por su medio artificial/social para cualquier fin, de allí es que debemos afirmar, que el aspecto genético es apenas la base o complemento, allí donde se puede construir tanto la destructividad como la no destructividad a partir del medio cultural y social en el cual cada cual existe.

Esta situación, La de la no destructividad (conocimiento aprendizaje, consciencia) es dinámica y es un componente de intercambio constante, interpersonal y grupal para la conformación de una sociedad humana armónica y sin guerras. Es decir una sociedad armónica se hace posible, cuando la competividad de carácter económico se hace innecesaria o desparece por completo, bajo cambios radicales de conformación y convivencia social.

 

- El proceso económico histórico.

Todas las vivencias humanas son resultado de la acción visible y no visible del comportamiento humano. Es decir la relación entre el conciente y subconsciente humano; La tradición y la legitimidad como parte no siempre visible puede haber sido conformada de antemano, para convertir a todo ser humano en un colectivo, en un avariento comerciante, un cobarde soldado, un pragmático del  egoísmo o un asesino actuando cómodamente bajo el peso de sus "costumbres" sociales legitimadas por la autoridad.

Las estructuras gubernamentales jerárquicas se hacen legítimas al entrenar a sus ciudadanos, los cuales deben ser reconocidos, premiados o castigados de acuerdo a su grado de legitimidad ante la máxima autoridad también auto legitimada. Todo sistema de sometimiento, es un sistema que reduce las facultades del desarrollo de lo conciente en cada ser humano, para acrecentar lo no consciente, mediante la ciega obediencia  y dar lugar a la organización de lo destructivo y lo competitivo como algo necesario.

Con lo anterior no se quiere afirmar que el ser humano en su estado natural es un ser pasivo, todo lo contrario, puede ser muy activo en la construcción del desarrollo del si mismo individual el sí mismo social, como lo muestra la historia de agrupaciones que supieron existir durante miles de años bajo el espectro de una especie de macro socialismo en relación armónica con los recursos del entorno natural.

Nuestra nueva teoría sobre el conflicto humano es de carácter histórico: Hace más de 7000 años atrás, surgía la primera religión monoteísta: unas tribus de nómadas, los hebreos, que en su constante movimiento, en lo básico dieron lugar al comportamiento mercantil o económico, conformando una cultura religiosa etnocentrista, gradualmente convertida en ley suprema, basada primero en símbolos económicos, muy cercanos a sus transacciones los que influyeron definitivamente en sus formas de conducta y tradiciones.

Ya que los hebreos son los primeros mercaderes organizados en aquella primitiva época, dieron ellos lugar a reglas jerárquicas de un orden religioso y económico diferenciador. Impregnan con sus ideas y normas, todas sus actividades, e influyen o imponen esa su ideología en otros grupos no hebreos, por aquellas regiones donde ellos recorren y hacen sus transacciones. Sus actividades base, une a todos los hebreos como grupo, en una especie de "nación etnocéntrica" nómada bajo reglas religiosas. Esta antigua religión de dominio y control, se hace un mecanismo impositivo de carácter social, es una herramienta del poder, donde el valor de lo supremo y la imposición a la obediencia es su objetivo, que además de dar cohesión al grupo, se proclama ser "selecto, único y elegido", para lograr así " sus codiciados premios materiales";  usa su sistema de imposición y de crecimiento unipolar a sus intereses materiales frente a los del resto de lo incluido en su contexto.

Esta ideología de carácter originalmente religioso, que impone una organización claramente diferenciadora. Selectos y ordenados por su Dios, se dan los hebreos, el derecho a ser dueños (propiedad privada) de todo lo existente en el entorno, incluyendo los seres humanos "no elegidos". Se sanciona a nombre de ese su extraño Dios, todo, y desde luego, se origina una problemática histórica de confrontación y conflicto ideológico continuo basado en la posesión material de los recursos como un premio a ganar a "cualquier precio".

- La traumática geopolítica occidental

Con lo anterior, se irá a dar una explicación psicosocial sobre la compleja situación en la geopolítica mundial originada por el desarrollo y crecimiento del primer mundo u occidente, como una continuación de la ideología del progreso material de origen judaico y basada en la explotación del hombre por el hombre.

Los estudios de psicología básica,  indican que el ser humano se mueve y actúa en su entorno bajo el influjo de sus estados, conscientes, subconscientes e inconscientes. Al igual que un témpano de hielo, la parte del consciente humano, es similar a la parte visible de un témpano de hielo sobre la superficie del mar, el resto, es decir los niveles subconscientes e inconcientes se encuentran por debajo, es decir; sus acciones no conscientes basadas en las costumbres adquiridas, las tradiciones, lo aprendido como norma, lo entrenado dogmáticamente y lo explicado mediante un sistema jerárquico y disciplinado de información,  mueven el ser humano en su acción rutinaria y su plano no siempre consciente.

 
 

Esto, nos permite explicar a grosso modo la problemática estructurada y de expansión originada por Europa y después por occidente en el mundo actual.

El peso muerto que sobrecarga al ser humano en su carrera cada vez mas hundida "bajo la superficie",  (debido al afán traumático por lo material y su disfunción economía)  indica que las actuales definiciones sobre desarrollo, son lo contrario del desarrollo humano real, y  en este caso desarrollar no es evolucionar.

Ya que el sentido de la evolución esta arraigado al ser que enfrenta su entorno vivo y cosmológico en condiciones constructivas, y logra un desarrollo consciente, en circunstancias naturales, solidarias y normalmente humanistas.  Ese ser, se hace integrado a medios dinámicos, con esfuerzos de inteligencia que se salen de la caparazón estática y protegida, fuera del marco de la violencia estructurada de cualquier sociedad establecida, rutinaria, mecánica o normativa. Es decir la perspectiva positiva de la evolución humana se dirige siempre a lograr mayores grados de consciencia individual y social sobre su entorno natural/social y de allí la armonía en la relación individuo versus entorno.

En consecuencia, en toda nuestra acción y reacción en el marco del medio social/económico impuesto culturalmente por el primer mundo, vivimos y desarrollamos nuestra diaria existencia motivada por la estrategia acumulativa y por ello de violencia estructurada.

Las estructuras sociales del dominio de hoy, son estructuras de enorme peso físico, cargando el subconsciente y la parte instintiva del ser humano, esto bajo los dictados de continua acumulación material e instrumentada al crecimiento extensivo de lo material. Y por ello el conflicto entre seres humanos es un fenómeno crónico, continuo y agravado por la necesidad del conocimiento dedicado a la competencia y los medios de conquista y guerra en diferentes áreas y niveles de acción (guerras económicas, ideológicas, territoriales, armadas y de sometimiento cultural). La competencia material es acompañada por diferentes grados de agresividad, métodos de fuerza y finalmente estrategias de guerra indirecta o directa.

En realidad, cualquier sistema social bajo el dominio de cualquier sistema económico, da  lugar al uso de la continua violencia, la cual se hace "necesaria" e inevitable, para alimentar el aparato de poder. Por ello la guerra en estos sistemas es un fenómeno constante. Si se habla de paz en estas sociedades del egoísmo, se habla en realidad de una guerra de bajo nivel o de "baja temperatura". Ya que los métodos de combate económico y de competencia para derribar a los mas débiles es algo constante, algo crónico, algo que esta integrado a  "las reglas del juego".

Bajo las normas de existencia actuales, aquel país o región geográfica que vela por sus intereses de paz e independencia, no puede pensar en la paz sino como una estrategia de simulación o falsificación ya que las diferentes formas de agresión desde aquellas regiones con intereses de crecimiento, competencia e imposición son algo permanente. Por ello tanto las regiones con tendencias endógenas al protegerse y las exógenas al agredir,  se encuentran en permanente estado de guerra, otra realidad no existe.

Únicamente cuando el sistema de dominio actual sea totalmente desmontado desde sus cimientos, será posible hablar de una ideología de paz basada en la cooperación y en la trascendencia y no en la competencia y la agresión.

La geopolítica occidental, es guerrerista aunque allí todo el mundo hable de paz.  La geopolítica de occidente es agresiva y es materialmente competitiva porque su infraestructura artificial esta basada en el crecimiento continuo de lo material y no de lo humano, esa geopolítica esta basada en la intensión de globalizar su economía y hacerse dueña de los recursos de la tierra, en manos de las pocas elites de seres que la componen con una cada vez menor humanidad contenida en sus consciencias.

La historia de las guerras, llamadas mundiales, son un alerta brutal y suficiente para entender la sicopatología de los que han conformado la proyección histórica de occidente. La historia de las otras guerras o la de la guerra fría, no son sino alteraciones de nombre, son una forma de encubrir los diferentes y cruentos conflictos, dictaduras y genocidio provocados por esta "civilización" sobre si y en especial sobre la periferia.

Sabemos al mismo tiempo,  frente a un cambio radical, que existe una potencial posibilidad de evolucionar, proceso más complejo, más consciente que normalmente tiene otros parámetros diferentes al fenómeno de acumular/depauperar materialmente. Pero tal proceso no es aplicable, ni es una posibilidad bajo la presente geopolítica de dominio estructurada por la actual civilización de primer mundo.

 - Los hechos  mas que las palabras.

El origen, la construcción y la expansión de Occidente, obedece al entrenamiento y adiestramiento cultural del ser humano proveniente de su historia.

Una historia saturada por los valores del judaísmo. Esto es, Europa nace con el oscurantismo que sabe consolidar el poder jerárquico, primero mediante "los directos representantes de Dios" quienes establecen las reglas de comportamiento social, económico y cultural. Después sus reyes y reyezuelos cuyo poder emana de Dios según acuerdos, con los representantes de la Iglesia.  De este modo, se puede asesinar a nombre de la religión, se puede castigar a nombre la de la religión y especialmente se gobierna a nombre de la religión.

Los interpretadores de Dios de acuerdo a las terribles formas de conducta establecidas por el Antiguo Testamento, hacen lo que quieren para conformar una sociedad de esclavos sin que estos se vean como esclavos, es decir se logra establecer, una actualización de la doctrina fascista del judaísmo.

Con este terrible procedimiento y proceso ideológico, se anula la real doctrina del Cristianismo y este desaparece en su perspectiva practica, simplemente pasa a ser algo a ser realizado en el cielo como un premio a la absurda obediencia y después de muertos.

Ya que tamaño engaño no podía permanecer por mucho tiempo, el poder es trasladado al "Contrato Social" que de "divino" que era, pasa sin cambios en su estructura fascista, a ser humano bajo el mismo armazón de la jerarquía del dominio y la explotación de los unos sobre los otros.

La horrible forma de vivir, crear cultura y explotar la Tierra y al ser humano, se legitimaron mediante este procedimiento brutal, rapaz, inhumano y anticristiano.

La bestia humana, se desarrolla, madura, se hace poderosa bajo el abrazo y el apoyo de esta forma "civilizada" de destruir el planeta y la evolución del ser humano y del ser vivo.

Cuando hoy Occidente habla de y establece la Globalización; es la globalización de la maldad y la autodestrucción de la humanidad. Con esta forma civilizada de existir no existe una salida para la vida y la existencia del ser humano. Repito, No existe salida posible.

 

- Consecuencias actuales y de futuro.

Mediante la especulación en torno a los recursos artificiales frente a los naturales vistos con un valor neto despreciable, junto al enorme valor  que se da al uso de la violencia directa, indirecta, estructural y organizada. Condiciones estas, establecidas como normas de acción, se va degradando al ser humano, amenazado o encerrado en los diferentes habitáculos de su sistema cerrado, se hace un ente desesperado,  agresivo o sumiso; pasa a ser algo parecido a un animal de zoológico, o un ente domestico de una granja automatizada. Un ser traumatizado, engañado y alimentado en un completo mundo virtual de ilusiones y de artificios.  Estos seres humanos han pasado a ser entrenados para legitimar lo aberrante del sistema mediante sus vivencias en su medio social contaminado.

El ente de las metrópolis de cualquier país que compite en este modelo de crecimiento, se aliena, se prostituye a su mundo determinista, mecánico, normativo, reducido, utilitario, y bajo la violencia del sistema económico y a sus mecanismos, limita y empobrece su mundo mental ya traumatizado al dedicarse a su vida controlada por los artificios. Los ciudadanos cada vez mas aborregados se acostumbran y necesitan entonces de un poder, externo compulsivo y ajeno a su decisión individual y de libre albedrío, que como una droga actúa sobre ellos por lo cual se impide una educación y un conocimiento para llegar a ser libres.

Bajo la justificación de legitimidad  "civilizada" que no seria aceptada ni en una manada de monos,  la llamada civilización actual ha impuesto diferentes estructuras sociales gobernadas y dirigidas a explotar los recursos naturales/humanos, que en su conversión a materiales inertes o de conserva, son evaluados por encima de las existencias individuales (en su facultad de consciencia, vida y evolución) y por encima del enorme valor de cada elemento vivo y natural en su condición biológica, diversa y de inteligencia trascendental.

El subdesarrollo mental/consciente del ciudadano de primer mundo se ha hecho mayor en la medida que los medios de la violencia estructurada se han hecho mas efectivos y diversificados. Cada ciudadano es controlado en todas sus acciones sean estas productivas, comunicativas o "libres". Solo falta el "chip" milagroso instalado en alguna parte del cuerpo de cada  individuo que sepa dirigir a cada cual bajo las "bondades del sistema gobernante". Y bajo esa efectiva cohesión y organización cibernético humanoide conquistar el resto de lo vivo, ya que la economía global necesita comerciar incluso con la mente/cuerpo de todos los seres aun vivos.

Que no sorprenda a nadie de aquellos que aun tiene su libre albedrío relativamente intacto, que esta macabra explicación sobre la expansión "de la maldad" de un sistema social, por los menos entendidos, únicamente podría ser atribuida a un libro de ciencia ficción, allí donde una raza alienígena logra encontrar el mejor elemento para el suicidio de la raza humana: la economía como aceleradora del egoísmo, la agresividad, la destructividad y las guerras permanentes del ser humano.

No hace mucho finalizo el carnaval - de - ultima - hora en occidente, cuando el colapso del "comunismo del este" paso a ser algo muy memorable. Un carnaval sin sentido, ni perspectiva, pues se alegraban en realidad ellos de la desaparición de un capitalismo de Estado, es decir un sistema bastante hermanado con lo occidental aunque un poco mas cauto en las pretensiones de dominio del capital global como sistema de esclavitud mundial. Y desde luego la guerra continua; y sus batallas consumen muchas áreas de acción, mientras la humanidad, se hunde en una calamidad moral/social o de recursos/salud.

Las batallas o las guerras nunca fueron frías, siempre son brutales, siempre han existido victimas, de la estúpida civilización que se impuso desde el oscurantismo hasta nuestros días.

Las tensiones aumentan, la guerra ha hecho presa de los países musulmanes. Una guerra del mas cobarde abuso, una guerra de carácter fascista porque los unos están armados hasta los dientes de lo supermoderno, los otros de valentía, bombas caseras, dinamitas y suicidio. Nunca antes la moral mundial humana se había hundido a tan bajo nivel, pues hasta los que contemplan como "neutrales" tienen responsabilidad en esta tremenda barbarie.

Pueden ser las bolsas occidentales, pueden ser los intereses regionales de primer mundo los dedicados a estas labores y hoy ya envalentonados provocan militar y económicamente a Rusia o tratan de debilitar a China, aunque ambos países actualmente  sean tan capitalistas  y tan poco conscientes del verdadero potencial humano de futuro, aquel que otro desarrollo podría haber dado lugar a una forma de existencia humana y de evolución individual/social soberana y libre.

Ahora, es el mundo árabe, victima de la agresión por el hecho de que allí hay petróleo e intereses de ocupación, el África lo es ya hace mucho, cualquier otro día será América Latina. Las guerras aun no se llaman mundiales, porque no son tan "importantes" como cuando el primer mundo pelea en su propio territorio. Se acerca sin embargo, el momento por ellos mismos originado y claro esta, tal vez  se clasifique esta guerra última, ya por otros, no como una tercer guerra mundial sino, para recordar a sangre y fuego lo absurdo y brutal del hecho, pase a ser denominada "la guerra del final de occidente".

 

Julio Alberto Rodríguez (2008-11-27)